Parecía que este día nunca iba a llegar. Nosotros mismos hemos ironizado sobre el asunto. Pero por fin, tras un eterno rosario de cambios de director, guionistas y hasta actor principal (lo que ha supuesto introducir de forma un tanto abrupta en el DCEU el concepto del multiverso que en mayor medida hasta ahora estaba desarrollando Marvel) por fin, 10 años después (sin contar como tal apariciones en otras películas) vuelve Batman a la gran pantalla.

En el momento de escribir el artículo, aún no sabemos si esta nueva película (que una vez más, se suma a la moda de Hollywood de que todo tenga una duración más propia de los grandes peplums) cumplirá las expectativas, pero, como es habitual, entre el fandom arrecian los viejos debates. 

¿Christian Bale? ¿Ben Affleck? Incluso habrá quien reivindique aún hoy en día las 2 películas dirigidas por Tim Burton y protagonizadas por Michael Keaton, quien hará un sorpresivo cameo en The Flash, prevista para el próximo noviembre.

Y, si bien hemos sido críticos en el pasado con el excesivo poder de las plataformas de streaming, eso no nos impide disfrutar de las mismas, siempre como un complemento. Así, en los últimos tiempos, HBO Max ha ido añadiendo diferentes películas animadas del caballero oscuro que, aunque sean menos conocidas, no dejan de ser menos interesantes. Veamos algunas de ellas hoy en Joróbate Flanders.

Batman del futuro: el regreso del Joker

Para muchos de nuestra generación, el primer contacto con Bruce Wayne y la corrupta Gotham City fue la serie animada producida por Paul Dini y Bruce Timm para Fox Kids entre 1992-95 y que en nuestro país emitió Telecinco, que lejos de la serie infantil que cabía esperar en la época, se volvió uno de los productos más oscuros y complejos que este personaje haya tenido nunca, convirtiéndose en una obra de culto.

Tras 2 temporadas y una especie de secuela/spin off (que pasó a emitirse en la nueva cadena Kids WB) de crítica más dividida, para la siguiente serie, sin abandonar aquel marcado estilo que hasta una Disney como la de los 90 trató de emular con Gargoyles, el cambio de estética fue radical, claramente inspirado en el anime que tantas horas de programación estaban empezando a llenar en ambas cadenas en EEUU. 

Tras un prólogo con un envejecido Wayne incapaz de seguir con la lucha contra el crimen que parece evocar El regreso del caballero oscuro, Batman Beyond (o Batman del futuro, como se le conoció en la emisión en España a través de TVE1) daba un salto a Neo-Gotham, una ciudad de tecnología muy avanzada pero aún más distópica que su antecesora.

El delincuente juvenil reformado Terry McGinnis huye de una banda conocida como "los Jokerz" yendo a parar a la mansión Wayne. Tras esto, su padre es asesinado en una confabulación orquestada por Derek Powers, el siniestro CEO de Powers Technology, que había absorbido Industrias Wayne. Debido a esto, finalmente Bruce acepta al joven como el nuevo Batman, haciéndolo pasar por su asistente personal.

Aparte del hecho de que en su desesperación tratara de detener a un delincuente común con una pistola en el piloto, a lo largo de la serie se da a entender un profundo trauma que había hecho que el antiguo justiciero abandonara la lucha distanciándose de sus amigos y de la Liga de la justicia. 

Estos hechos se narrarían en la película directa a vídeo que nos ocupa, en la que el acto inaugural donde Bruce Wayne celebra la recuperación del control de su empresa familiar se ve empañado por el ataque de su antiguo archienemigo, el Joker (que, como en la serie original, vuelve a estar doblado por Mark Hamill) . Pero es imposible que siga vivo, ¿o no?

Aunque no spoilearé para los que no la hayan visto, esta es una película cargada de intriga y acción que, a la vez que amplia este nuevo lore, sirve de epílogo de su antecesora mediante un flashback que muestra la lucha final de Bruce y la "Batgirl" Barbara Gordon (convertida en la nueva comisaria) con una animación distinta al resto de la película que retoma el estilo de las 2 primeras temporadas con algunos elementos de la segunda serie.

Tras un primer montaje censurado debido al tiroteo en Columbine que retrasó el lanzamiento, finalmente 2 años después apareció el montaje íntegro que es el que podemos disfrutar afortunadamente a día de hoy en HBO Max, siendo así la primera película animada de Batman en ser calificada PG-13. También cabe destacar (?) un mediocre juego de UbiSoft para Playstation y Nintendo 64 en los últimos coletazos de la quinta generación.

Batman: la broma asesina

De los muchos comics que han existido (y siguen publicándose hasta nuestros días) de Batman, uno de los más controvertidos (como no podía ser de otra manera con el autor que nos ocupa) que todavía genera encendidos debates a día de hoy es La broma asesina, novela gráfica guionizada por Alan Moore en 1988, donde el Joker se fuga una vez más del manicomio Arkham para desarrollar su plan más cruel con tal de demostrar que su enemigo es igual que él.

Siendo de las primeras obras que profundizó en el pasado de este personaje (mostrándole como un humorista fracasado que tuvo que hacerse pasar por el delincuente "capucha roja" para unos mafiosos con tal de ayudar a su esposa) una de las críticas recurrentes sobre esta historia es el papel que juega Batgirl, que queda poco menos que como un mero recurso de guión.

Así, cuando en 2016 (bajo guión de Brian Azzarello) llegó la esperada adaptación cinematográfica (que de nuevo retomaba al reparto de la serie 90s, esta vez convirtiéndose en la primera película en solitario del personaje con calficación R) se decidió ampliar considerablemente el desarrollo del personaje de Barbara.

Sin embargo, esto, lejos de mejorar la opinión sobre el trato al personaje, lo hizo si cabe más polémico, ya que, de 70 minutos de metraje, más de 30 parecen el episodio piloto de una serie de Batgirl muy vagamente conectado con la historia principal, tanto en el argumento propiamente dicho como en la ambientación, que pasa de ser contemporánea (con móviles, ordenadores y otros dispositivos modernos) a adoptar de golpe un estilo retro más fiel al material original. 

Pese a todo, la animación una vez más cumple a la perfección, y en general, es un producto muy recomendable para fans incondicionales y quizá no tanto para el gran público. Eso sí, si hay padres leyendo esto, recordad que no es precisamente una película familiar.

Batman: el regreso de los cruzados enmascarados

Al contrario que las películas anteriores, seguramente muchos os estaréis enterando en este mismo momento de la existencia de este film. Para explicar de qué se trata, hay que retroceder en el tiempo hasta los años 60. Hasta el pasado (no tan) oscuro de Batman.

Y es que, hasta la publicación por parte de Frank Miller de El regreso del caballero oscuro y la ya mencionada película de Burton, Bruce Wayne quedó durante años asociado al horterismo de un tiempo que tan brillantemente supo satirizar Mike Myers en la saga Austin Powers. 

Hablamos como no de la serie de televisión que protagonizaron Adam West y Burt Ward para ABC entre 1966-68. En esa época, el comic (como todos los superhéroes de su tiempo) estaba marcado por el estricto Comics Code, siendo esta adaptación televisiva casi más una sitcom que otra cosa.

 Con la llegada de internet, se fue generando una especie de reivindicación irónica, convirtiéndose en memes (al igual que pasó con la serie animada de Spiderman que se emitió por las mismas fechas) las onomatopeyas que aparecían en pantalla durante las peleas, los cada vez más absurdos inventos que Batman sacaba de su cinturón a modo de "deus ex machina", o el baile conocido como "batusi".

Y mientras La broma asesina o Batman V Superman dividían al fandom de DC, pasó completamente desapercibido en ese mismo año 2016 el estreno de una película animada dirigida por Rick Morales (especializado en parodias de lo que podríamos llamar el subgénero "películas Lego") con las voces de West, Ward y quien fuera la primera de las 3 Catwoman que tuvo la serie, Julie Newmar.

Habrá quien argumente que el guión resulta de lo más estúpido enrevesado (Joker, Catwoman, Pingüino y Enigma tratan de corromper a Batman para distraer a Gotham de sus propios delitos) y los diálogos son, por decirlo finamente, peculiares. 

Pero acaso, ¿no es lo que buscamos precisamente de un producto así? Y, a la vez que se autoparodian con los aparatos imposibles y demás guionazos (así como las moralejas que Batman daba entre pelea y pelea a sus jóvenes espectadores) se permiten también incluir pequeños guiños tanto a la obra de Miller como a la trilogía de Christopher Nolan. Una hora de risas aseguradas que además cuenta con el aliciente en la versión doblada de Claudio Serrano, la voz por antonomasia de Bruce Wayne en castellano.

Como siempre, podéis sugerir otras películas en los comentarios. Dedicado a la memoria de Adam West.